El presidente de la República, Hugo Chávez Frías, desde su columna dominical, ha sido enfático al señalar que la oligarquía hondureña que apoya el golpe de Estado contra del Gobierno legítimo y constitucional del presidente de Honduras, Manuel Zelaya, no va a poder detener la Alianza Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América (Alba) a punta de fusiles.
El presidente de la República, Hugo Chávez Frías, desde su columna dominical, ha sido enfático al señalar que la oligarquía hondureña que apoya el golpe de Estado contra del Gobierno legítimo y constitucional del presidente de Honduras, Manuel Zelaya, no va a poder detener la Alianza Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América (Alba) a punta de fusiles.
Su señalamiento lo hace en su columna Las Líneas de Chávez, publicada este domingo, titulada “¡Niños y niñas: Venceremos!”, a propósito de que este día se celebra el Día del Niño en Venezuela.“
A la oligarquía hondureña que ha querido torcer el curso de la historia, desde esta página les digo que sus apetitos de poder jamás podrán con los hombres y las mujeres, herederos de Morazán, que ya despertaron y se enfilan a ser grandes, soberanos y libres”, expresa el Presidente.
Chávez Frías expresa que este domingo está alegre porque se celebra 30 años de la Revolución Sandinista liderado por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), llamado así en memoria de Augusto Nicolas Calderón Sandino (Augusto César Sandino), y que puso fin a la dictadura de la familia Somoza.
Luego, con un amplio respaldo popular, el Frente Sandinista entró en Managua el 19 de julio de 1979.
No obstante a esta celebración, el Jefe de Estado confiesa que su alegría no es ni puede ser completa al saber que la hermana nación de Honduras permanece en tinieblas, desde el 28 de junio, cuando se concretó el golpe de Estado.
“Han sido 22 días en los que lo más deleznable de la oligarquía hondureña ha querido torcer el curso de la historia”, insiste.Sin embargo, hace la salvedad de que cada hondureño y cada hondureña no descansará hasta ver a su querido Mel, como llaman por cariño al presidente Zelaya, de vuelta a la Presidencia.
“Retumba la voz iluminadora del general Morazán: 'Si nos colocamos entre la humillación y la guerra, elegiríamos siempre el último partido, aun cuando tengamos la certeza de no poder salvar más que el honor'.
El general José Francisco Morazán Quezada fue Presidente de la República Federal de Centroamérica (1830-1834;1835-1839), Jefe de Estado de Honduras (1827-1830), de Guatemala (1829), de El Salvador (1839-1840) y de Costa Rica (1842).
Su figura encarna el ideal unionista centroamericano, además es considerado uno de los jefes militares más importantes en la historia de América Central.
Chávez Frías enfatiza en su columna dominical que si Nicaragua venció un 19 de julio de 1979, con la Revolución Sandinista, más temprano que tarde Honduras vencerá.“Fuerza y resistencia, hondureños, que la razón y el destino los acompañan”, expresa Chávez Frías.
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